Las aportaciones de mujeres y artistas intelectuales han marcado la cultura vasca y el arte contemporáneo, aunque son menos reconocidas
FRIDA- En profundidad
¿Tienen las mujeres que desnudarse para entrar en los museos? La famosa pregunta del colectivo Guerrilla Girls, pionero en denunciar la precariedad y la invisibilidad de las mujeres artistas, sigue vigente en Euskadi. Si pensamos en los autores que más fama cosechan, incluyendo las nuevas generaciones (el escritor Unai Elorriaga, el cineasta Aitzol Aramaio, el bailarín Igor Yebra…), comprobamos que siguen siendo pocas las mujeres que se cuelan en los circuitos comerciales. Y no es por una cuestión de preparación, ya que son mayoría en todas las carreras relacionadas con la cultura en
Pese a ser más precarias y menos reconocidas, desde los años 1970 resulta imposible hacer un análisis de la cultura vasca y del arte contemporáneo sin que las autoras sean protagonistas. Sus aportaciones han sido clave tanto en el reforzamiento del euskera como en la evolución hacia un arte vanguardista y comprometido.
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